Una niña de
trece años se quita la vida porque sus compañeros la molestaban con violencia
en el colegio.
Una profesora
parvularia le amarra los pies a un niño de cuatro años, a las patas de la
silla, porque es muy inquieto.
La primera era
una de las mejores alumnas del establecimiento y la Directora declara, con una
feroz cara de palo, que “son conductas naturales de la edad”.
La otra
profesora no da la cara y el niño dice, sin entender la situación, que lo
amarró con una huincha.
Pienso en ese
muchacho de un colegio, en Estados Unidos, que llegó con una pistola y asesinó
a unos cuantos de sus compañeros antes de dispararse a él mismo.
Pienso en
aquel Universitario, de un país europeo, que llegó a la universidad con un
fusil y mató a varios, incluido a un profesor, antes de suicidarse.
Pienso en la
diferencia de la magnitud de estos actos de violencia entre los ocurridos en
países desarrollados y los que ocurren aquí, que vamos, recién, camino al
desarrollo.
¿Hacia ese
desarrollo?
¿Qué nos está
pasando?
¿Será verdad
que la mamá está haciendo falta en el hogar?
¿Será verdad
aquello de que el hombre vive sólo para causar su propia muerte?
¿Será verdad
que es por eso que le llamamos “pasarlo bien” a todo lo que nos mata?
¿Estaré
demasiado viejo y por eso no le veo la gracia a los actos de extrema violencia?
En un hospital
entregan dos cadáveres de niños recién nacidos a familiares que no corresponden
y dicen, las autoridades del recinto, que van a hacer una exhaustiva
investigación.
¿Por qué no
capacitan al personal en el manejo de las computadoras?
¿Dónde creen
ustedes que estuvo el error?
¿Dónde creen
ustedes que la niña aprendió a colgarse utilizando una sábana de su propia
cama?
¿Dónde creen
ustedes que a aquella parvularia se le olvidó amar?
¿Dónde creen
ustedes que se formó aquella directora de colegio que dice que empujar a una
niña al suicidio “son conductas naturales de la edad”?
Hoy me fui a
acostar, después de las noticias, y parece que no pasa nada bueno en el país.
A mí no me parece
así, pero como no me pude dormir me levanté, me vine al computador y escribí
esta nota para mi blog.
¿Valdrá la
pena desarrollarse para cambiar la sábana de la propia cama por una bazooka y
matar a varios antes de reventarse uno mismo?