Hoy me encontré en el Libro de visitas de mi sitio Web un correo de don Marcos
E. Ovando kenova@hotmail.com
La verdad es que me resultó muy emocionante leer sus cariñosas líneas ya
que yo he estado varias veces en México y conozco del cariño de ese pueblo y
del respeto que sienten los cantantes por los autores de las canciones. Lo que,
por supuesto no imaginé que uno de mis cantos iba a ser interpretado en una de
esas fiestas de música.
Quiero agradecerle a don Marcos y les pido que le escriban porque le va
a hacer muy bien recibir noticias de la Patria lejana y le van a dar una
tremenda alegría a él y a su familia. Yo sé lo que es vivir lejos y lo bien que
hace una carta para los males del corazón.
El texto de su mensaje es este:
“Estimado Maestro: hace un par de días, en una gran plaza de la ciudad
de México se realizó un Festival de Música Latinoamericana, los cuales son
típicos en esta gran ciudad de gente generosa y amable. Uno de los artistas comenzó cantando: "Déjame bailar contigo la
alegría linda del último vals, amor, amor...". No fue fácil contenerse y
escuchar que al final, el cantante haya comentado que "la canción que
acaban de escuchar, pertenece al gran cantautor chileno Tito Fernández".
Más tarde tuve la oportunidad de platicar con el artista mexicano y comentarle
acerca de la gran importancia que tiene Tito Fernández para los chilenos de
conciencia y para aquéllos que, de una u otra manera, han hecho de tu canto una
esperanza de vida y de paz. Saludos desde México Maestro”.
Sin comentarios.