Raúl está enfermo. Un día, siendo joven, se fue a
Canadá del brazo de su “Gringa” y de la mano de Gonzalito chico en busca de una
mejor situación para LA familia. Trabajó toda su vida como animal latino y hoy
“El Indio” me llamó para decirme que estaba con la Gringa pero enfermo de
Alzheimer y tiene Parkinson. Siento rabia, pena, pero por sobre todo
impotencia. No puedo ayudar. Cada vez que pasé por ese país me quedé hospedado
en su casa y nos dimos nuestro tradicional paseo a las Cataratas del Niágara.
¿Qué te pasó “conejo”? ¿Será ese el destino de todos? ¿Te acuerdas cuando
estuvimos ensayando un dúo para irnos a cantar por el mundo? Luego me va a
llamar el “Oso”, estoy seguro, y vamos a llorar juntos tu destino. Te queremos
mucho “conejo” porque no tenemos nada mejor, para ti, que nuestro cariño. ¿Qué
podemos hacer para acompañarte?
Anoto que ayer se fue y me duele…