¡Viva el 18 conche’ la lora! Tomen harto vino
tinto (el otro hace mal) y coman emblemáticas empanadas y llénense la guata con
pino, cebollas aceitunas, coman asado, si les alcanza la plata (si no cómanse
un lomo de toro de esos pocos que todavía quedan en el suelo). Péguenle en la
pera a alguien, o arréglense de alguna manera pero pásenlo chancho, y si les
toca poner la pera a ustedes háganlo con amor porque el amor es fecundo y el
odio nada engendra y la cacha’e la espá.
Bailen harta cueca, zapateen harto en las
fondas o donde se les antoje, pal caso la cuestión es zapatear y sentirse
chileno. (Y nadita de venir a quejarse, después, de que “quedé esperando
guagua” porque pa’ eso está la píldora del día siguiente).
Saludos a todos y gracias por los comentarios
a este blog, que me ha servido para conocer a un montón de gente que todavía no
había conocido, fíjese.
¡Me gusta el vino porque el vino es güeno…!
¡Y eso sería todo…!