Estaba leyendo en
la prensa de hoy acerca del tremendo éxito de ventas que ha tenido el muñeco
vudú que se vende en una casa comercial del barrio alto. ¿Sabrá la gente que ha
comprado dicho muñeco en el lío que se están metiendo? Con toda seguridad que
no, pero lo que más me aterrorizó fue leer en un blog (persiguiendo el tema) la
solicitud de un muchacho que pide que le enseñen a manejar dicho muñeco “para
hacerle mal a un profesor”. ¿Sabrá el muchacho ese lo que está pidiendo o lo
que intenta hacer? ¿Le clavará un alfiler en los genitales o en el corazón? Tal
vez alguien lo tome como broma pero este muchacho no y eso es lo que me
preocupa. Un muñeco vudú es peor que un arma de fuego, un machete afilado o una
guillotina. ¿A quién se le ocurrió comercializar tan terrorífica arma mortal?
¿Se puede autorizar eso? ¿Se puede?