Se llama Franco (no le
hace honor al apellido) vino ayer, se puso un buzo muy sucio, se subió al
techo, examinó la cuestión y me pidió plata para materiales necesarios para el trabajo.
(Se trata de tapar una gotera que nos molesta en los inviernos). Vino hoy, me
pidió una escoba, se puso el buzo, se subió al techo (de nuevo) barrió, se
bajó, se sacó el buzo y me dijo que iba a comprar los materiales, salió a la
una, a las cinco lo llamé por teléfono y me dijo que “justo me iba a llamar…”
porque quedó en panne con la camioneta. No le creo porque antes de irse desarmó
la escalera, limpió y ordenó todo, de modo que se fue y lo de la camioneta no
se lo compro. Me dijo que iba a venir mañana a las nueve (lo mismo que hoy) por
eso digo que no le hace honor al apellido.
Eso…