Esta es la última semana del año que se va. Faltan tres días para la noche en que se encenderán las viejas, los petardos, se abrazará la gente, se emborrachará la gente, se mentirá la gente, etc... y en un par de días habrá que volver al trabajo, con la caña mala (la resaca) sin un peso en el bolsillo y pensando en cómo lo voy a hacer este año... La cosa va a ser igual que el año pasado cuando pasó lo mismo que esta vez... Antes veíamos desde el balcón los fuegos artificiales y ahora construyeron un edificio que no nos deja ver casi nada... En la televisión nos van a mostrar el derroche de colores y fuegos de artificio de un puerto que queda cerca, donde el desorden, los pitos y las cornetas van a sonar más fuerte que nunca. La sonora de Tommy Rey va a cantar: "un año máaaaas, que se vaaaa, cuantos se han ido yaaaa". Entonces tal vez bailemos como se hace todos los años y vamos a despertar, en la madrugada, en alguna parte...
Eso...