viernes, 27 de julio de 2018

JULIO 2018

Ha pasado un año. Mi hija tiene pelo. Parece que se mejoró de su enfermedad y ha venido de visita a mi casa, con sus hijos y su compañero. Es invierno y hace mucho frío. Tengo de recuerdo unos autitos chicos, de juguete, de modo que es cierto que estuvo aquí. Hace poco me escribió una hermosa carta y su hermana me dijo que estaba muy contenta. Ya no toca el Cello pero la quiero igual. Quiere estudiar algo relacionado con la medicina y ayudar a los que lo necesitan. A veces estos golpes fuertes de la vida hacen que cambie toda la perspectiva que uno tiene. Como para olvidarse de la música y dedicarse a otras cosas. Ha pasado un año. Estoy más viejo y tengo poco trabajo. Este año nevó, de nuevo, y recién estamos empezando el invierno. La gente salió a las calles a jugar con la nieve y yo volví a escribir cosas en mis blogs. 
Eso...